Daniel Noboa, en un discurso enérgico en Durán, denunció la corrupción y el abandono en la ciudad. Se comprometió a combatir la violencia y el tráfico de drogas mediante acciones concretas para mejorar la seguridad.
Según él, Durán representa al “viejo Ecuador”, donde el sistema corrupto ha marginado a la población. Su administración está decidida a transformar la ciudad y devolver la paz a sus ciudadanos. Recientemente, se descubrió una oficina paralela del municipio que facilitaba el tráfico de tierras y negocios ilícitos. Noboa aseguró que su gobierno no tiene miedo y está comprometido a tomar Durán en sus propias manos y devolverla a sus legítimos dueños, las familias duraneñas.