El presidente de la República, Daniel Noboa, ha tomado medidas para abordar la grave sequía que afecta al país. Según los informes del Operador Nacional de Electricidad-Cenace, en julio de 2024 se registró un significativo descenso en los aportes hídricos en todas las cuencas hidrográficas. Por ejemplo, los caudales promedio alcanzaron mínimos históricos en Mazar y en la central Minas San Francisco.
En respuesta a esta situación, el decreto dispone que el Ministerio de Energía y Minas coordine y ejecute todas las acciones necesarias con el Cenace y las empresas de generación, transmisión y distribución de energía para mitigar los efectos de la sequía. Además, se asignarán los recursos presupuestarios suficientes para abordar este problema.
El déficit energético actual de Ecuador se estima en 1.000 megavatios (MW), y el Gobierno busca cubrir entre 450 y 500 MW mediante la contratación de energía adicional. Esta medida es crucial para evitar apagones como los que afectaron al país en 2024. A pesar de la contratación de una barcaza que proporciona 341 MW de energía adicional, aún queda una brecha significativa por cubrir.