Una mujer británica de 102 años, Manette Baillie, celebró su cumpleaños de manera extraordinaria al realizar un salto en paracaídas desde una altura de 2,000 metros. Este evento, que tuvo lugar en el este de Inglaterra, la convirtió en la persona más anciana en realizar esta hazaña en el país.
El salto no solo marcó un hito personal para Baillie, sino que también sirvió para recaudar fondos para varias organizaciones benéficas, incluyendo las Ambulancias Aéreas de East Anglia. Baillie, describió la experiencia como “un poco aterradora” pero increíblemente emocionante.
Manette Baillie tiene un historial aventurero, a los 100 años condujo un Ferrari a 210 km/h en el circuito de Silverstone. Inspirada por un amigo de 85 años que también saltó en paracaídas, Baillie decidió que su avanzada edad no sería un impedimento para seguir desafiando los límites. “Simplemente deseo que las personas que se acercan a los 80 o los 90 años no renuncien a nada. Hay que continuar”, afirmó.
Su espíritu intrépido y su deseo de desafiar los límites de la edad la han convertido en una inspiración para muchos, demostrando que la edad es solo un número y que siempre es posible buscar nuevas experiencias.