La esterilización de las mascotas es una práctica que beneficia tanto a los animales como a las personas. Al realizar este procedimiento quirúrgico, se evitan problemas de salud, se controla la población y se contribuye al bienestar animal y social.
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La esterilización consiste en la extracción de los órganos reproductores de los perros y gatos, lo que impide que puedan tener crías y camadas. Esto tiene varias ventajas para la salud de las mascotas, como:
- Se reduce el riesgo de tumores mamarios en las hembras, que son consecuencia del proceso hormonal.
- Se previene la hiperplasia prostática, tanto benigna como maligna, en los machos.
- Se evita el cáncer de mama y el cáncer de próstata en ambos sexos.
- Se disminuye la incidencia de infecciones uterinas y urinarias en las hembras.
- Se controla la necesidad de marcar territorio y evitar peleas entre los machos.
Además, la esterilización tiene beneficios para el medio ambiente y la sociedad. Al evitar la reproducción no deseada, se reduce el número de animales abandonados o que viven en situación de calle. Esto contribuye a disminuir la contaminación ambiental causada por sus desechos, así como a prevenir enfermedades zoonóticas que pueden transmitirse a los humanos.
La esterilización es una cirugía electiva, que se puede realizar a partir de las 8 semanas de edad en los perros y a partir del primer celo en los gatos. El costo es menor que el de tener y cuidar a las crías, y tiene un retorno económico a medio y largo plazo. Además, es una forma de demostrar amor y responsabilidad hacia nuestras mascotas.
Por estas razones, se recomienda esterilizar a todas las mascotas que se adopten o tengan como propietarios. Así se garantiza su calidad de vida y se fomenta una tenencia responsable. La esterilización es un acto de amor hacia nuestros amigos peludos
